? En el equilibrio está la virtud
Los regatistas quieren navegar casi siempre sea en lo que sea. Esto es un poco lo que está pasando con medio equipo pre-olímpico que está inmerso de lleno en la campaña para Paris 2024 pero también en el circuito de SailGP. Esto en algún momento ha podido generar cierta tensión entre deportistas y federación; pero parece que las cosas se van solucionando y cada uno ha cedido en sus pretensiones y ahora mismo la convivencia es la que debe ser.
Está claro que aquí todos los actores se necesitan. Los mejores olímpicos están en SailGP con lo que no se puede tensar la cuerda más de lo necesario e imprescindible.
Lo importante y positivo, en este caso es que los resultados en mundiales y europeos han sido muy buenos, Diego Botín y Florian Trittel en 49er y Jordi Xammar y Nora Brugman en 470 han sido plata y Paula Barceló bronce en el de FX; con lo que aquí paz y después gloria.
Aquí el dilema está en si los resultados olímpicos no son buenos, que afortunadamente no es así, o si se producen alguna lesión navegando en SailGP, el ejemplo está en el de Tara Pacheco, que se lesionó justo hace un año entrenando en Cádiz y ya no ha vuelto a competir.
La vela se ha profesionalizado de tal manera que, los regatistas punteros, es difícil que diga que navegar en barcos y en equipos de primer nivel. En realidad, esto ha pasado siempre. Los medallistas olímpicos, que acostumbraban a ser los más cotizados sean los hermanos Luis y Josele Doreste, Toño Gorostegui, Jordi Calafat, Kiko Sánchez Luna, Fernando León, Pepote Ballester, Iker Martínez, Xabi Fernández, Natàlia Via-Dufresne…y así un largo etcétera han sido, y siguen siendo aún hoy muchos de ellos, lo más buscados para estar algunos de ellos en equipos de Copa América, vuelta al mundo o circuitos de Swan y Superyates. ¿Quién no quiere tener un Luis Doreste a bordo?
Es por ello que es más que comprensible que si el núcleo duro del equipo español de SailGP sean los olímpicos, con los que además empezó todo con la Youth America’s Cup y que ahora no quieren perder el tren de navegar frente a algunos que en su día triunfaron en la vela olímpica como Ben Ainslie, Tom Slingsby o Peter Burling y también en la Copa América como James Spithill.
Todo esto auspiciado por un Russell Coutts, el que manda en esto de SailGP, lo que quiere es tener a los mejores de cada sitio, y en España, que hay muy buenos regatistas donde elegir, ha optado por rodearse de los mejores olímpicos en activo.
Mientras no se pisen las competiciones y los caminos, todo puede ir bien. También la presión a medida que se acerque la fecha olímpica puede notarse, para Tokio se consiguió gestionar bastante bien, Jordi Xammar y Joan Cardona volvieron con medalla y a Diego Botín se le escapó por los pelos, con lo que bien llevado y con buena voluntad por parte de todos, se puede hacer.
Como en todas las cosas de la vida: En el equilibrio está la virtud.